domingo, 31 de agosto de 2008

De vuelta a Bangkok, Hong Kong...y escala en casa

Con esta entrada nos acercamos al final de nuestro periplo asiático. Nos volvimos a Bangkok (Dani un poco molido por lo de las olas) por cuarta vez. Algunas imágenes de la ciudad nos son ya tremendamente familiares, para ser que hace dos meses no sabíamos que encontraríamos por estas latitudes.
Wat Arun fotografiado por n-ésima vez
Aún así nos las arreglamos para ver cosas nuevas, como el mercado del barrio chino,
Pescados y calamares 'jareados'
Más templos,
Aunque no se diría, éste no lo habíamos visitado
Budhas:
Budha reclinado: 46m de largo, 15 de alto...
También repetimos cosas: las calles de los mochileros, el mercado de amuletos, el río, más comida tailandesa,más compras...en fin, mucho ajetreo después de nuestro relax por el sur, pero pocas ganas de que se nos acabara el viaje
Desayunando en un puesto callejero, antes de irnos pa'l avión.
De Bangkok nos volvemos a otro lugar también familiar...

¿sobrevolando el Mekong?
Hace dos meses era un lugar super-exótico, ahora vamos por la ciudad como quien va a hacer unas compras a Barcelona,...allí estábamos de nuevo contemplando el fabuloso 'Skyline' de Hong Kong,
rodeados de espíritu olímpico:
En Hong Kong las paradas de metro no salen a la calle, sino a macro-centros comerciales. Ahora no teníamos guía y nos dió la impresión de que son como nasas: es fácil entrar, pero salir es una odisea. Cuando después de mucha vuelta en uno de ellos por fin salimos, nos encontramos con la retransmisión de una prueba atlética:
Final de triatlón, los españoles, 4to y 5to puesto.
En nuestra anterior estancia habíamos dejado pendiente ver la ciudad desde lo alto, por lo que a la tarde nos subimos a un mirador en tranvía:

El mirador es la azotea de este edificio
Pillamos una tarde realmente buena:

Hong Kong
De nuevo abajo y con un cielo tan azul, los rascacielos salen muy fotogénicos , como de revista de arquitectura:
Por la noche no faltó la asomada al canal:
Y a la mañana siguiente al aeropuerto. Desde la parada de la guagua al aeropuerto nos dió tiempo de hacerle una foto a nuestro 'hotel', una pensión más correcta de lo que pueda parecer a la vista del aspecto externo del edificio; nuestros anfitriones de la ida estaban de viaje, por lo que nos buscamos una 'guest house' por internet, pero camino de ella nos enganchó la señora de la pensioneta (...si, ya vimos tus recomendaciones de hoteles, pero algo tendremos que poner en la entrada de 'arrastrados en Asia'...)
No era tan terrorífico como parece
Luego el vuelo de vuelta, ésta vez todo de día a pesar de estar en camino unas 17 horas, contando la escala en Helsinki; cosas de perseguir al sol por nuestro planeta...Llegamos a Barcelona con algo de mal cuerpo, no tanto por las horas de vuelo, sino por la tragedia del vuelo de Madrid a Gran Canaria de la cuál nos enteramos nada más aterrizar...
A medio camino, un río al este de los Urales, Rusia
Después de pasar la noche en Barcelona ( cosas de vivir apartados de las capitales ) nos bajamos a casa, donde nos hemos reencontrado con familia y amigos después de casi dos meses fuera. Pero nuestra historia continúa.

Algunos recuerdillos que nos trajimos...

Ya lo decíamos al comienzo de la entrada; con ésto termina lo que es el relato cronológico de este magnífico viaje a Tailandia (con escala en Hong Kong e incursión en Laos). Ésto no significa que no vayan a aparecer más entradas. Como hicimos con Australia, intentaremos publicar algunas más con curiosidades del país que complementen lo ya contado. Además, Dani está colgando fotos a saco en el Panoramio y pueden echar un vistazo...
Pero ahora las noticias, para todos los que aún no sepan que nos vamos...
A partir de la próxima entrada,el blog 'marianydani' pasa a publicarse desde La Palma, lugar donde a los susodichos nos han dado una comisión de servicios para dar clases el curso que ahora comienza. Este blog intentará también mantenerles informados de nuestras peripecias en la Caldera de Taburiente, el Teneguía o los barrancos de Garafía...Como nos vamos un poco a la aventura, no sabemos cuando tendremos oportunidad de escribir...vayan mirando.
¡Hasta pronto!

viernes, 29 de agosto de 2008

Phuket

Seguimos avanzando por Tailandia, ahora sólo un poco más hacia el Oste, para llegar a otro de los destinos míticos del país, Phuket. En la entrada anterior mencionábamos que Phuket era una isla, pero por los pelos, y es que una autopista atraviesa sobre el mar los apenas 500m que la separan del continente, así que llegamos allí en furgoneta.
De Phuket son famosas sus playas, sobre todo las de la costa Oeste, así que entre todas ellas elegimos la de Kata. Como todas las playas tienen un aspecto parecido, ponemos fotos de la que estuvimos para que se hagan una idea:

La playa norte de Kata, Phuket.

y ésta es la sur.
Como las playas están al W, hay puesta de sol...

La capital de la isla, Phuket (se llaman igual) tiene cierto interés, el suficiente para dedicarle una mañana. Al ser una ciudad donde han comerciado árabes, hindúes, chinos y europeos, conserva cierto aire colonial, con algunos edificios interesantes del s.XIX y principios del XX:



Algunas calles de Phuket Town.

Un templo chino del XIX.
Luego de callejear, hacer algunas compras y comer una sopa de noodles con bolas de pescado, nos volvemos a la playa, donde Dani tenía un claro objetivo

En la guagua con una idea fija en mente...

Con su hermana Arminda cogiendo olas en Bali, Dani no quería irse de Tailandia sin aprender a hacer surf. De hecho, la elección de Kata como campo base en la isla no fue al azar, se trata de una de las playas más famosas de Tailandia para la práctica del Surf. A continuación va una serie de fotos de la primera tarde surfera...

Aquí con pinta de 'surfer'

¡a por ella!

' Le llamaban Bodhi '
Ésto eran los primeros pinitos, al día siguiente no paró de 10 de la mañana hasta las 6 de la tarde, y porque teníamos el avión a Bangkok, nuestro próximo capítulo. Y Marián también bajo un par de olas, haciendo 'bodyboard'...

miércoles, 27 de agosto de 2008

más islas...

Volvamos a relajarnos un rato a las playas de Railay. Nosotros también lo hicimos uno de los días, aunque como siempre acabamos sin parar la pata...


Railay unas horas antes de la puesta de sol. A ésto lo llaman turismo
de masas...¿como estarían el mismo día en el Mediterráneo?
Veamos algunas fotos de la zona:
Acantilados de Railay desde el mar, volviendo de alguna excursión.
Islotes en la playa sur

Fíjense en el tamaño de las estalactitas...
Incluso tuvimos tiempo para visitas culturales...
Templo local en una cueva...sí, son lo que parecen...amuletos fálicos para
la buena suerte en la pesca (de pescados...)
...para explorar la selva...
Marián al pié de un ficus gigante.
Explorando las montañas de Railay hicimos amistad con Esti y Aitor, con los cuáles compartimos buenas charlas e informaciones viajeras, y la fantástica vista a continuación desde el 'view point', al cuál se accede trepando por cuerdas:
Todos los días hay trasiego de turistas que vienen y van; el lugar de desembarco ya dijímos que era una playa de fango con mangles. El fango es obligatorio pisarlo:
Lección de botánica: los 'mangles' son unos árboles adaptados a crecer en aguas saladas, siempre que éstas sean lo suficientemente tranquilas (bahías poco profundas, estuarios...).Cuando forman bosque se llaman manglares, muy típicos de los climas tropicales.
Mangles. Las raíces ofrecen protección a multitud de pequeños peces.
Las semillas son muy curiosas, unos arpones que se clavan en la arena al caer del árbol, normalmente con un principio de raices y hojas ya formados:

Marián nos muestra una semilla de mangle.

Pero como nosotros, volvamos de excursión por el Mar de Andamán. Contratamos un nuevo tour para ver corales y echar un vistazo a la famosa y presuntamente masificada Ko Phi Phi.
La primera parada la hicimos en Bamboo Island. Espectacular:

En los arrecifes de coral hay tantos peces que la tierra firme sólo la pisamos para la foto de arriba. Y aquí nada de agua turbia:
Corales en Bamboo Island. Al fondo Ko Phi Phi Don.
Después te llevan a otra isla, Ko Phi Phi Leh, para ver una playa de película:

La Playa, la de la película.
Claro que la foto es un poco de trampa, nuestro barco no era éste, a duras pena conseguí un encuadre sin turistas, y el solajero a las doce es justiciero de verdad...más honesta es la siguiente...
The Beach; nuestro barco es una de las lanchas...
Para relajarte de tanto barco y guiri, te llevan luego a bucear en la siguiente foto. No paras de ver peces espectaculares: 'pejeverdes' de color azul, 'viejas'(aquí peces loro) verdes, azules y rosa, o de color rojo con pintas azules, peces mariposa, ballesta, payaso,...un pescado era violeta con aletas amarillas...
Ni los documentales de Costeau...
Y sigue el tour, una bahía que esconde una laguna de 25m de profundidad entre acantilados de 100m:
Entrando a la Laguna...

Después nos trasladan a la isla principal, Ko Phi Phi Don, a comer en una especie de comedor para turistas con cientos de ellos. Habíamos decidido que a Ko Phi Phi no iríamos a pasar la noche porque todos nos habían dicho que estaba muy masificada, llena de mochileros y adolescentes escandalosos, y precios un tanto inflados...Puede ser, pero por lo que nosotros pudimos ver en nuestra fugaz visita, tampoco nos pareció que fuera 'Marina d'0r'...Hasta nos penó un poco no haberle dedicado unos días.
Vista de una de las playas más turísticas de Ko Phi Phi...

El mismo sitio, mirando para el otro lado. Si va tanta gente, igual es porque es bonito.

Y para acabar la excursión y hacer la digestión, te llevan a un arrecife en alta mar, entre Ko Phi Phi y Bamboo Island, para ver más peces y unos corales de 'Mundo Submarino'

Alta mar con miles de peces.
De vuelta al continente, pasamos nuestra última tarde en Railay, un lugar que dió para mucho; además de lo ya visto:

Espeleología:
Astronomía (habrá una futura ampliación del tema):
Para los que controlan: Grus y Tucana



Relax tropical:

Atardeceres místicos:


En fin, si piensan que éste lugar nos gustó, no se equivocan...pero al final nos tuvimos que ir. En nuestro próximo capítulo nos trasladaremos a Phuket, que por los pelos, resulta ser también otra isla.